En Nepal se mantiene viva la tradición de la kumari, donde una niña preadolescente es venerada como deidad hasta alcanzar la pubertad. Esta semana, Aryatara Shakya, de dos años y ocho meses, fue elegida como la nueva diosa viviente. Ella sucedió a Trishna Shakya, quien ocupaba el rol desde 2017. La elección recae en niñas de la comunidad Newar del valle de Katmandú, bajo estrictos requisitos físicos, psicológicos y espirituales, además de pruebas de valentía. Durante los festivales, la kumari es llevada en procesiones, vestida de rojo y con el tradicional “tercer ojo” pintado en la frente.
Esta es una práctica con raíces tanto en el hinduismo como en el budismo, con apoyo de astrólogos. Entre los criterios más relevantes para la selección se encuentran la pureza espiritual, la ausencia de miedo a la oscuridad y la posesión de los 32 “lachhins”. Además, la aspirante debe demostrar coraje en pruebas que ponen a prueba su valentía, como pasar la noche rodeada de cabezas de ganado muerto.
La figura de la kumari es adorada tanto por hindúes como por budistas, quienes la consideran fuente de bendiciones y prosperidad. Durante los festivales religiosos, la diosa viviente es llevada en procesiones solemnes, vestida de rojo, con el cabello recogido en altos moños y un “tercer ojo” pintado en la frente como símbolo de poder divino.
“Sabíamos que iba a ser alguien muy especial”
Su padre, Ananta Shakya, declaró que antes de nacer ya había señales de su destino, pues su madre soñó durante el embarazo que sería una diosa. El martes, la niña fue trasladada al templo-palacio que será su hogar durante varios años, mientras devotos se inclinaban a sus pies en señal de respeto.
La tradición de las kumaris también implica una vida reclusa, con escasas salidas al año y un círculo limitado de amistades. En la actualidad se han incorporado cambios, como la posibilidad de recibir clases privadas o disponer de televisión. Sin embargo, las ex-kumaris aún enfrentan dificultades para adaptarse a la vida cotidiana tras dejar el templo. El gobierno ha comenzado a ofrecerles una pensión mensual, pero persisten creencias populares que complican su vida adulta, como el temor a que quienes se casen con ellas mueran jóvenes.
Reference
Shrestha, N. (2025, 30 septiembre). Tras un metódico proceso de selección, Nepal elige a una niña de dos años como su nueva “diosa viviente”. LA NACION. https://www.lanacion.com.ar/el-mundo/tras-un-metodico-proceso-de-seleccion-nepal-elige-a-una-nina-de-dos-anos-como-su-nueva-diosa-nid30092025/