Vladimir Putin firmó este lunes la ley que retira oficialmente a Rusia de la Convención Europea para la Prevención de la Tortura, marcando otro paso en el alejamiento de Moscú de los organismos occidentales tras la invasión a Ucrania. Aunque Rusia ya había sido expulsada del Consejo de Europa en 2022, seguía siendo parte del convenio de inspección a cárceles, aunque en la práctica las visitas internacionales estaban suspendidas desde entonces.
Con esta decisión, el Kremlin deja de estar obligado a permitir el acceso de observadores a su sistema penitenciario. La Duma justificó la salida acusando al Consejo de Europa de “discriminación” y de bloquear la participación rusa en sus órganos. El gobierno insiste en que la medida no afectará a sus ciudadanos y asegura que continuará comprometido con otros tratados internacionales contra la tortura.
Sin embargo, la ONU advirtió que la retirada “levanta señales de alerta” sobre lo que ocurre tras las rejas en Rusia, donde organizaciones internacionales y Ucrania acusan al ejército ruso de torturar prisioneros y civiles en zonas ocupadas. Moscú ha respondido con acusaciones similares contra Kiev, pero su historial de obstaculizar el trabajo de organismos de derechos humanos dentro del país genera crecientes sospechas sobre la situación real en sus cárceles y centros de detención.
Referencia:
Dw, N. (2025, September 29). Rusia abandona Convención Europea para Prevención de Tortura. dw.com. https://www.dw.com/es/rusia-abandona-convenci%C3%B3n-europea-para-prevenci%C3%B3n-de-tortura/a-74179892