El Gobierno de Claudia Sheinbaum ha salido a defender con firmeza el nuevo paquete arancelario que entrará en vigor en 2026 y que afectará a más de 1.400 productos provenientes, principalmente, de Asia. Para el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, la medida no es menor: busca proteger alrededor de 350.000 empleos en sectores estratégicos como el automotriz, el acero, la manufactura, el textil y el calzado, además de generar una recaudación estimada de 30.000 millones de pesos anuales. El mensaje central es claro: no se trata de castigar a un país, sino de frenar prácticas de competencia desleal que están erosionando la industria nacional.

Las cifras explican la urgencia. En solo dos años, las importaciones automotrices crecieron 34%, las de acero 12,4% y las de calzado más de 22%. Según Economía, muchos de estos productos entran al país a precios por debajo de los de referencia, una estrategia común para ganar mercado que, de no contenerse, podría traducirse en cierres de plantas y despidos masivos, especialmente en estados industriales clave como Nuevo León, Jalisco, Guanajuato o Puebla. El aumento de aranceles (que irá del 5% al 50%) busca poner un “piso parejo” antes de que el daño sea irreversible.
Sheinbaum ha enmarcado esta decisión dentro del Plan México y de una política deliberada de sustitución de importaciones: importar menos, producir más y exportar con mayor valor agregado. Tanto ella como Ebrard han insistido en que el impacto no se trasladará al consumidor final y que el diseño final del paquete fue ajustado tras dialogar con empresarios, legisladores y socios comerciales, suavizando algunos gravámenes donde la sustitución inmediata resultaba inviable.
Sin embargo, el trasfondo geopolítico es imposible de ignorar. Aunque el Gobierno niega que la medida esté dirigida contra China o pensada para agradar a Washington, varios analistas advierten que el giro arancelario coincide con la estrategia comercial de Estados Unidos y podría ser una ficha clave rumbo a la revisión del T-MEC en 2026. Entre la protección del empleo, el riesgo inflacionario y la presión internacional, México apuesta por una política industrial más activa, consciente de que el costo de no hacer nada podría ser aún mayor.
Referencia:
Suárez, K. (2025c, December 15). El secretario de Economía mexicano defiende que el muro arancelario a China y otros países protegerá 350.000 empleos en el país. El País México. https://elpais.com/mexico/economia/2025-12-15/el-secretario-de-economia-mexicano-defiende-que-el-muro-arancelario-a-china-y-otros-paises-protegera-350000-empleos-en-el-pais.html
