Miles de jóvenes de Alemania, ante el nuevo servicio militar: “Da la sensación de que se avecina una guerra, y eso da miedo”

Alemania retomará a partir del próximo año un sistema de reclutamiento militar parcial que obligará a todos los jóvenes nacidos en 2008 (y a los que cumplan 18 años en adelante) a responder si estarían dispuestos a alistarse de forma voluntaria. Aunque el servicio militar sigue siendo voluntario en esta primera fase, el Gobierno exigirá que los jóvenes completen un formulario con sus datos personales y acudan gradualmente a un examen médico para evaluar su aptitud física y psicológica. Con ello, Berlín pretende reconstruir un registro actualizado de posibles reclutas ante un escenario de creciente tensión internacional, especialmente por la guerra en Ucrania. Otros países europeos como Bélgica y Francia también avanzan hacia modelos similares.

Entre los adolescentes alemanes, sin embargo, la resistencia es fuerte. Muchos jóvenes en Berlín afirman que no estarían dispuestos a alistarse ni siquiera con incentivos económicos, como el salario mínimo de 2.600 euros brutos al mes ofrecido por el Gobierno. Algunos aseguran que, si el servicio llegará a ser obligatorio, recurrirían a la objeción de conciencia o incluso considerarían abandonar el país. El temor a una posible guerra y el rechazo moral a la militarización dominan sus argumentos. Para algunos, la medida se percibe como un intento de atraer a jóvenes de entornos más vulnerables a las fuerzas armadas, lo que critican como injusto y riesgoso.

El Gobierno alemán justifica la reforma en su objetivo de construir “el ejército más fuerte de Europa” y aumentar el número de soldados activos y reservistas hacia 2035. El canciller Friedrich Merz insiste en que la defensa nacional “compete a toda la sociedad” y que la paz “no es gratuita”. Según el proyecto de ley, si los voluntarios fueran insuficientes, podría reactivarse el servicio militar obligatorio suspendido en 2011, aunque ello requeriría una aprobación parlamentaria.

El debate también afecta a familias con antecedentes migratorios. Muchos jóvenes con doble nacionalidad o identidades diversas cuestionan el vínculo entre pertenencia nacional y servicio militar. Algunos se sienten culturalmente alemanes y consideran obtener la nacionalidad pese a las obligaciones militares; otros, como padres y madres, temen el impacto de que sus hijos deban someterse a un proceso que, para ellos, refleja la inestabilidad política de Europa. En cualquier caso, el nuevo modelo alemán está reabriendo un debate generacional sobre identidad, militarización y el futuro de la seguridad europea.

Referencia:

De Cabo, A. (2025, December 1). Miles de jóvenes de Alemania, ante el nuevo servicio militar: “Da la sensación de que se avecina una guerra, y eso da miedo.” El País. https://elpais.com/internacional/2025-12-01/miles-de-jovenes-de-alemania-ante-el-nuevo-servicio-militar-da-la-sensacion-de-que-se-avecina-una-guerra-y-eso-da-miedo.html#?rel=lom